Utilizamos un espectrómetro de rayos X para realizar un análisis superficial del metal proporcionado por el cliente, hasta una profundidad de 0.7 micras. Este análisis permite obtener una estimación cuantitativa y cualitativa de la composición del material. Adaptamos la capacidad del análisis según las necesidades del cliente. Aceptamos el material en diversas presentaciones, como lingotes, polvo, viruta, arena y azogue.